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Superar el perfeccionismo del escritor_MINIATURA

Superar el perfeccionismo del escritor

Superar el perfeccionismo del escritor puede traerte incontables ventajas en tu carrera literaria.

Dejar de procrastinar, ser un escritor más productivo y empezar a vender tus libros en todo el mundo son solo algunos de los beneficios que obtienes cuando dejas de ser un escritor perfeccionista en exceso.

¿Qué distingue a los autores demasiado perfeccionistas de aquellos con un nivel de exigencia adecuado? ¿Qué desventajas tienen los escritores que se obsesionan con la perfección de sus escritos? ¿Es cierto que buscar siempre la perfección en tu escritura podría perjudicarte?

Continúa leyendo y conocerás por qué deberías superar el perfeccionismo del escritor.

Qué es el perfeccionismo en los escritores

Ser un escritor perfeccionista no es algo malo en sí mismo. Sucede que el oficio literario es terreno fértil para ciertas manías y hábitos nada provechosos para los autores.

El perfeccionismo en los escritores suele reflejarse en un deseo incontrolable de evitar hasta el más mínimo de los errores de escritura, tanto en cuestiones de fondo como en asuntos de forma.

Cómo superar el perfeccionismo del escritor

La única manera de superar el perfeccionismo del escritor es detenernos a pensar en lo que estamos haciendo y evaluar su verdadera conveniencia para nuestra carrera.

¿Qué significa esto? Pues quiere decir que, si demoras la publicación de tu libro durante años y años solo porque crees que no tiene la mejor calidad del mundo, ese supuesto perfeccionismo será algo negativo.

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Cómo dejar de ser un escritor tan perfeccionista

Si te consideras un escritor perfeccionista en exceso, es hora de que enfrentes la realidad y busques una manera de moderar tu actitud.

Esto no quiere decir que a partir de ahora dejarás de revisar tus textos o escribirás todo rápido y sin pensar, ansioso por publicar el primer borrador de tu libro. Todos los extremos son malos.

¿Está mal ser un escritor perfeccionista?

Tienes que saber esto ya mismo: no tiene nada de malo ser un escritor perfeccionista. El problema viene cuando ese perfeccionismo te ciega y te hace impenetrable a cualquier comentario o crítica constructiva.

Ten en cuenta que la perfección es tan solo un noble ideal, una tendencia saludable en cualquier trabajo, y la escritura no es una excepción. Sin embargo, escribir algo que sea considerado perfecto de manera absoluta está reservado solo para los grandes genios de la literatura e, incluso en esos casos, las críticas nunca tardan en llegar.

La cura para el perfeccionismo del escritor

Entonces, como podrás ver, curar el perfeccionismo en los escritores requiere una buena dosis de realidad, un encuentro cara a cara con aquello que todos dicen, pero pocos aceptan: nadie es perfecto.

Perfeccionismo y miedo al fracaso literario

Superar el perfeccionismo del escritor conlleva una inmensa ventaja para los autores capaces de hacerlo. Estos profesionales se mueven en el mundo literario con total desenvoltura y son seguros de sí mismos porque conocen sus limitaciones y conviven con ellas.

Los escritores que se obsesionan con la perfección, en cambio, suelen quedarse siempre en un mismo lugar, dándole vueltas y vueltas a una sola obra que jamás terminan y nunca publican, se preocupan en exceso por el «qué dirán» y no tienen una vida literaria plena.

Escritores perfeccionistas

Cuando un editor le llama la atención a un autor sobre su perfeccionismo desmedido, es frecuente que ese autor invoque nombres de escritores geniales que siguieron ese camino y hoy son glorias de la literatura.

El caso de Gustave Flaubert es paradigmático. Flaubert estaba en verdad obsesionado con lograr una prosa impecable, crear un estilo tan exquisito que fuera capaz de sostener cualquier historia, sin importar su verdadera sustancia.

De más está decir que pocos escritores pueden compararse con un autor tan genial como el francés, si es que una comparación de ese tipo es lícita.

Ser un escritor detallista

Otro autor famoso por su perfeccionismo es Jorge Luis Borges, para quien un texto solo dejaba de corregirse cuando se enviaba a la imprenta.

El estilo lacónico de Borges se ajusta a la perfección con el deseo de hallar la palabra exacta y la sintaxis precisa para cada línea, dejando de lado todo lo superfluo.

Cómo se supera el perfeccionismo del escritor: guía práctica

Ahora veremos un abordaje realista que te permitirá abandonar el perfeccionismo excesivo y te abrirá nuevos horizontes en tu práctica literaria.

¿Te consideras un escritor perfeccionista en extremo? ¿Te gustaría avanzar más rápido en tu escritura sin el peso insoportable de obligarte a ser perfecto?

Guia practica para superar el perfeccionismo del escritor- Infografia

Sigue estos consejos:

#1. Priorizar la creatividad antes que la perfección

Esta es la clave principal para escribir un buen texto. Las personas esperan encontrar una buena novela, un buen manual, un libro cautivador… El proceso creativo siempre es un poco desordenado, la escritura no sigue un plan perfecto desde el principio.

Enfócate en escribir algo que agregue valor a tu público. Si dudas de la calidad del contenido o quieres corregir el texto antes de publicarlo, puedes solicitar un informe de lectura y una corrección de estilo para resolver estos aspectos.

#2. Tener metas realistas como escritor

El exceso de perfeccionismo te aleja de la realidad porque pone la vara demasiado alta. Si nunca escribiste una novela de quinientas páginas, por ejemplo, no esperes hacerlo bien desde el primer día ni tenerla lista en un par de meses.

Ese tipo de perfeccionismo es el más peligroso de todos porque, tarde o temprano, te conduce a la inacción total.

#3. Evitar comparaciones exageradas

Muchos autores desean ser «perfectos» como los escritores que admiran. ¡Gran error! Si escribes filosofía, nunca serás Platón; si lo tuyo es la novela, olvídate de escribir como García Márquez; ¿eres poeta y quieres igualar a Lope de Vega? ¡No lo conseguirás!

Conoce tu arte y date la oportunidad de crecer en tu propio estilo, sin necesidad de comparaciones desmesuradas.

#4. Ser indulgente con uno mismo

Equivocarse está bien, es lo normal en cualquier proceso creativo, incluida la escritura. No conviertas tus errores en frustraciones y derrotas. Aprovecha cada paso para madurar y crecer. ¿No tuviste un buen día escribiendo hoy? ¡Mañana será mucho mejor!

#5. Buscar opiniones objetivas

El peor error de un autor demasiado perfeccionista es prestar atención a los haters y sus comentarios malintencionados. Tampoco es recomendable fiarse demasiado de lo que digan tus amigos y otros seres queridos sobre tu escritura.

El informe de lectura profesional es una manera eficaz de obtener un diagnóstico realista sobre lo que escribiste, un comentario bien fundamentado con las indicaciones necesarias para optimizar tu texto del modo más simple.

#6. Pensar fuera de la caja

A veces le damos vueltas y vueltas a un mismo párrafo, a una misma idea, a un mismo personaje, y no podemos encontrar su forma perfecta, siempre sentimos que falta algo.

En estos casos lo mejor es pensar fuera de la caja, cambiar el punto de vista por completo y enfocarnos desde una perspectiva diferente. De esta manera nos libramos de problemas imposibles de corregir y le damos nueva frescura a nuestro texto.

#7. Dejar reposar el libro

Este es el paso definitivo que te permite dejar de lado el perfeccionismo para siempre. Los libros no se escriben en un día ni en una semana. Escribir es un proceso que lleva tiempo, las palabras decantan con lentitud en cada página hasta cristalizarse en un texto de calidad.

Escribe durante varios días seguidos y deja pasar otros tantos sin mirar el texto. Al regresar notarás lo fácil que te resulta perfeccionar tu escritura con un ajuste aquí y otro allá.

Qué pasa si soy un escritor demasiado perfeccionista

Pues no pasa nada, salvo que eso te impida avanzar. Buscar la perfección literaria es un ideal loable, aunque dejará de serlo si se convierte en una traba, en un impedimento para seguir adelante con tu carrera.

Acción masiva imperfecta en escritura

Si de verdad quieres ser escritor, debes ponerte a escribir y dejar de hablar de ello. Evitar la escritura por miedo a equivocarte no tiene sentido.

Escribe todo lo que puedas sin exigirte de manera desmedida. Avanza, corrige, deja reposar. ¡Pero no dejes de escribir!

Cómo superar el perfeccionismo del escritor: recuerda esto

¿Te gustaría eliminar el perfeccionismo exagerado en tu escritura? Aquí tienes las claves:

#1. No ensimismarse

Pasar cientos de horas en la soledad de tus pensamientos y tu escritura no te llevará por buen camino. Concéntrate lo necesario, pero no te cierres al mundo. La realidad no es perfecta y los libros son parte de ella.

#2. No autocastigarse

Si no logras los mejores resultados en la primera vez, ¡ánimo! Pronto mejorarás, siempre y cuando te lo propongas. Valora lo que escribes, es tu principal capital.

#3. Autopublicar

La autopublicación de libros en Amazon KDP podría ser una solución casi mágica para tu excesivo perfeccionismo. ¿Por qué? Pues porque no requiere compromisos con terceras personas, tú lo decides todo y pones tus reglas de escritura. Además, si detectas errores en tu libro una vez que lo hayas publicado o quieres modificar algo en él, puedes hacerlo cuantas veces quieras.

¿Te consideras un escritor demasiado perfeccionista? ¿Cuál es tu solución para este problema? ¿Crees que está bien el perfeccionismo del escritor?

¡Déjanos tu comentario aquí abajo, nos encantaría saber qué piensas sobre este tema!

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8 comentarios en “Superar el perfeccionismo del escritor”

  1. Lucía Blanco Vázquez

    Creo que yo tengo ese defecto. Si repaso un texto veinte veces, veinte veces cambiaré algo. Una frase, una palabra, un diálogo…y así hasta el infinito.
    Es agotador y te ves envuelto en una espiral que no tiene fin ya que nunca ves el texto listo para enviarlo.
    Recuerdo que Gabriel García Márquez decía que el tardaba más en corregir un texto que en escribirlo y yo sigo su ejemplo. Por algo soy una rendida admiradora de su obra.

    1. Es normal lo que te sucede, muchos escritores luchan con ese perfeccionismo. A veces, establecer un límite claro puede ayudarte a detener esa espiral. Un truco es decidir que tras una última revisión, dejarás el texto reposar unos días y luego lo enviarás, aunque te siga pareciendo que podrías cambiar algo. ¡La perfección es un objetivo inalcanzable! Gabriel García Márquez también decía que «las obras no se terminan, se abandonan», así que, en algún momento, es mejor soltarlo.

  2. No creo que sea perfeccionista, no sé mucha técnica, lo que busco es el sonido de las frases como melodías con diferentes música pero con la misma vos. Me gusta jugar con las palabras según el significado del texto. Disfruto a mi manera. No me gusta el grosor de la historia de una vida que se me hace larga, prefiero hacerla intensa y que el lector adivine lo que falta. Es verdad que cuando no encuentro la manera de plasmar lo que siento, tengo prohibido que nadie me hable, pero eso son manías no es perfección, también es cierto que siempre que vuelvo al escrito, siempre corrijo.
    Yo creo que la perfección no va con el artista, dejaría de serlo para convertirse en idea.
    Un saludo y buen comienzo de semana.

    1. Pilar: Me encanta cómo describes tu proceso, ese enfoque en el sonido de las frases y el juego con las palabras le da un toque muy personal a tu escritura. Al final, la perfección no siempre es lo que buscamos, sino la autenticidad en lo que transmitimos. Y como dices, volver a un texto para corregir es parte del viaje, más que una búsqueda de perfección. ¡Que sigas disfrutando de cada palabra! Un saludo y buen comienzo de semana también para ti.

  3. Saludos Roberto
    Ser un escritor perfeccionista.
    Yo pienso que no es malo ser perfeccionista en si pues esa es una condición de la mente del escritor que le dice que debe tratar por todos los medios de dejar algo bien escrito y sin faltas ortográficas etc. En mi caso y pensando en ello pienso que soy un poco perfecciónista pues cada párrafo lo fui escribiendo y verificando. De forma tal que me gustara y viera que estaba bien escrito. Después de yo verificar que estuviera bien. Pase cada párrafo a verificar en ChatGPT y muchas veces veía que ChatGPT quitaba palabras que en realidad estaban de más y en otras ponía otras que las veía también de más y me quedaba con mi versión. Pero fíjate que todo eso era una forma de buscar la perfección. Recuerdo que en las proyecciones de las ganancias sentía que no estaban bien. Entonces indague con varios contadores y nada me hacía sentir que estaban del todo bien proyectadas. Hasta que un colega Economista amigo mío de carrera me indicó la forma correcta de proyectar y ahí sentí que si había dado con la solución. El caso es que buscar la perfección no está mal pues se trata de dejar algo que valga la pena. Pero si ya veo que todo está bien. En realidad seguir y seguir buscando cosas eso si sería malo.

    1. Miguel:Ser perfeccionista puede ser una ventaja si te ayuda a mejorar tu escritura, como mencionas con los ajustes que haces en cada párrafo. Sin embargo, hay que tener cuidado de no caer en la trampa de la revisión infinita. El perfeccionismo excesivo puede retrasar la publicación y nunca se sentirá que está «perfecto». Lo importante es encontrar ese punto donde la obra cumple con un estándar alto, pero sin quedar atrapado en la duda. Al final, es mejor tener un buen libro publicado que un libro perfecto guardado en un cajón.

        1. ¡Qué bien que estés de acuerdo! El perfeccionismo es algo que todos los escritores enfrentamos en algún momento, pero lo importante es no dejar que nos frene. ¡Ánimo con tus proyectos!

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