Son muchas las empresas que deciden deslocalizar parte de su cadena de producción a territorios que ofrecen unos marcos de colaboración muy atractivos y difíciles de encontrar en casa. Entre los principales motivos del «Offshore Outsourcing» cabe destacar la reducción de costes, la consolidación del negocio, la maximización de recursos, la apertura a nuevos mercados, una mejora general del servicio, obtener mayor flexibilidad o aumentar el valor del accionista. Los llamados países emergentes, capitaneados por China, India y Rusia, brindan un mayor abanico de oportunidades al «Offshoring». Un menor precio de la mano de obra, la gran extensión territorial o el alto número de población son tres impulsos suficientes para dejarse cautivar por estas zonas. Sin embargo, estas oportunidades son un arma de doble filo. Mientras por un lado seducen al inversor, por otro pueden llegar a provocar el más absoluto fracaso dentro de la organización.
Bajo un marco perfectamente documentado y apoyado con casos reales de multinacionales de primer nivel, el autor presenta un estudio que pretende facilitar al directivo la toma de decisiones en procesos de deslocalización empresarial.
Jordi Florenza es Ingeniero Industrial y PDD por IESE. Ha desarrollado su carrera profesional en diversas multinacionales del sector de la consultoría tecnológica y su experiencia está marcada por la elaboración de proyectos estratégicos para grandes empresas referentes en sus sectores. Su presencia internacional en Europa, Sudamérica, Estados Unidos y Asia ha contribuido a enriquecer una visión íntegra y detallada de los secretos que se esconden detrás de la deslocalización.