¿Ve aquel barco de casco rojo amarrado al rompeolas? Hoy ha descargado el petróleo y mañana lo limpiarán. ¿Y sabe que ocurrirá? Que en un kilómetro a la redonda dejarán la superficie del agua más negra que mi suerte, pudriéndolo todo con el viscoso alquitrán. Y, por si fuera poco, según los entendidos, los plásticos están ahogando los mares y los océanos.
Tendríamos que hacer “algo”.