Seiscientos años después del nacimiento de Cristo, surgió en Arabia una nueva fe, el islam, iniciándose un proceso que ha consolidado a esta religión como una forma de vida para la cuarta parte de la población mundial.
Dios y el Corán de Mahoma brinda un pertinente análisis que busca responder al interrogante acerca de si todo el contenido del libro sagrado fundamental del islam ha sido efectivamente revelado por Dios al profeta Mahoma o si, por el contrario, algunas de sus partes no tienen un origen divino. Tal cometido lo lleva a cabo el autor a través de diálogos imaginarios y la reflexión sobre diversos pasajes coránicos; todo ello bajo la asunción de la creencia –que se supone esencial para el islam– de que Dios es único y perfecto.