¿A dónde van a parar nuestros pensamientos, nuestra consciencia, nuestra energía? ¿Cómo se manifiesta la relación entre el ser y el cosmos? ¿Volvemos a ser polvo de estrellas? ¿Podrá viajar nuestra energía por el universo como partículas de luz? ¿Podremos descubrir otras formas-de-ser en el universo, otros seres en él? ¿Qué pasa con la energía y la información que nos «materializa» en este mundo? ¿Encontraremos otras formas de energía pertenecientes a otros seres humanos que pasaron por lo mismo, es decir, aquellos que ya no están con nosotros? ¿Encontraremos la energía perdida de nuestros seres queridos, al momento de morir?
Esta novela, parcialmente basada en hechos experimentados por el propio autor, transita la experiencia de la muerte y la trascendencia del ser a lo largo de una serie de acontecimientos físico-cuánticos. El narrador nos acompaña, mediante la explicación detallada de los fenómenos físicos involucrados en el viaje del propio ser, al momento de morir el cuerpo, en la forma de fotones y taquiones que se confunden con la materia. De esta manera, ¿qué sucede con la información que hemos recabado a lo largo de toda nuestra existencia en vida/corporal?Esta ficción narra la trascendencia de un hombre llamado Ricardo Cantero luego de sufrir un paro cardíaco. A lo largo de la novela, Cantero experimenta y revive toda su vida, desde muchachito hasta que emprende su ¿partida? de este mundo, al mismo tiempo que adquiere un conocimiento trascendental no conocido por los vivos (sí sospechado) acerca del ser espiritual, que comienza a expandirse a niveles casi inmateriales, lo que lo lleva a experimentar otra clase de acontecimientos, incluidos unos en otra parte del universo.