Sin pretensiones academicistas, este texto sumerge al lector en una reflexión sobre la fuerza de la espiritualidad para emprender los cambios que nuestras vidas demandan. Partiendo de sus propias experiencias y vivencias, la autora nos señala las claves para desprendernos de los prejuicios del pasado y ocuparnos del presente, en medio de las exigencias del mundo actual.
Es un libro sobre aprender todos los días, sobre la gran escuela que es la vida y sobre la fe, escrito en un estilo directo, con frases cortas y sentencias precisas, orientadas a cómo canalizar correctamente la sabiduría para solventar situaciones adversas y acometer los cambios necesarios para una existencia en armonía.