Surgidos de las profundidades del cristianismo, los textos apócrifos —es decir, ocultos— del Nuevo Testamento resurgen hoy de manera asombrosa. En la actualidad, en cristianos y no cristianos hay un interés creciente sobre estos escritos, que revelan la diversidad y el vigor del cristianismo de los primeros siglos. Esta obra no solo muestra una selección de estos textos, ya que son contrastados con pasajes bíblicos y con una de las doctrinas secretas más antiguas que se conocen, el hermetismo, a fin de que adquiera el lector los conocimientos básicos que le ayuden a vislumbrar la Verdad.
Te voy a dar una pequeña pista. El solipsismo, que viene de las palabras solus ipse, que significa “solo yo existo”, es una teoría filosófica que postula que solo existes tú, y que lo que experimentas como realidad es una simulación de tu mente. Esta es la idea central de una de las teorías filosóficas más inquietantes y desafiantes jamás concebidas. Según el solipsismo, solo tu mente es segura de existir, mientras que el mundo exterior y las demás personas podrían ser simplemente ilusiones sin existencia real o propia. Es una idea tan radical que si fuera cierta significaría que vives en una realidad creada únicamente por ti. Entonces, qué sentido tendría la moral, el amor o la espiritualidad. Por eso, la mayoría de los filósofos consideran el solipsismo una hipótesis extrema. Ahora bien, ¿podría el solipsismo estar velado o expresado indirectamente en el cristianismo y en el hermetismo?