Algunas corrientes filosóficas y religiosas, aconsejan emplear la vejez como una preparación de la mente, para paliar la angustia que conlleva: la soledad. el envejecimiento y la espera de la muerte.
En esa etapa, recomiendan que:
“Vivamos de acuerdo con la naturaleza y dejemos de lado las pasiones y los apegos que nos distraen de lo que es realmente importante”.
“Consideremos que la vejez con una moderada espiritualidad es una etapa para aprender y crecer”.
“Nos enfoquemos en aquello que podemos controlar, aceptar la realidad sin resistencia o rechazo y abstraernos de aquello que no dependa de nosotros”.
“Procuremos concienciarnos de que la muerte forma parte de la vida”.
“Aceptemos que ese fin de ciclo, es necesario para la existencia de todos los seres vivos”.
Quizá nos convenga: utilizar nuestra Soledad en la Vejez, para conseguir una Buena Muerte.