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Miedo a la hoja en blanco

Miedo a la hoja en blanco

El miedo a la hoja en blanco es uno de los temores más comunes entre los escritores. No importa si eres un autor novato o si ya lograste vender miles de ejemplares de tus libros: el miedo a la página en blanco puede aparecer cualquier día y hacerte una mala jugada.

¿Cómo evitar el miedo a la hoja en blanco? Existen varias estrategias que puedes adoptar para transformar ese temor en inspiración para escribir.

Continúa leyendo y aprenderás cómo superar el miedo a la hoja en blanco y aumentar tu productividad como escritor.

Síndrome de la página en blanco

¿Qué es el miedo a la página en blanco? El miedo a la página en blanco es esa sensación desagradable de incertidumbre que tenemos al comenzar a redactar un texto importante. El temor viene cuando no sabemos qué escribir.

Entonces ponemos una frase o quizás un párrafo y lo borramos porque no nos gusta. Esta secuencia puede repetirse varias veces, hasta convertirse en una situación desesperante.

Me da miedo la hoja en blanco

El síndrome de la página en blanco es un fenómeno peculiar que puede ocurrirnos en cualquier momento de la carrera de escritor. Lo más común es experimentar miedo a la página en blanco en el comienzo de un nuevo proyecto literario.

Autores de novela, no ficción y otros nichos literarios son vulnerables por igual a esta incómoda situación.

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Qué es una página en blanco

Al escribir un libro, la primera página siempre estará en blanco hasta que logremos poner algo en ella. Esta afirmación parece algo obvio, aunque no lo es. Todo lo contrario, es el auténtico quid de la cuestión.

La explicación es sencillísima: tu miedo a la hoja en blanco desaparece rápido si sabes qué escribir. En otras palabras, necesitas enfocar la cuestión con pragmatismo. Necesitas un plan para empezar a escribir.

Bloqueos que nos impiden escribir

La página en blanco suele ser una consecuencia del famoso bloqueo del escritor. Este bloqueo tiene características especiales, como te contamos en este artículo.

La solución es ocuparse en lugar de preocuparse. Así, incluso teniendo un caso grave de bloqueo del escritor, serás capaz de superar la página en blanco y comenzar a escribir tu libro.

Síndrome del escritor impostor

El síndrome del escritor impostor es otro factor importante en el miedo a la hoja en blanco. En pocas palabras, el síndrome del escritor impostor ocurre cuando un autor siente que no es bueno en su trabajo, aunque venda muchos libros, aunque el público ame su obra.

Los escritores que atraviesan este síndrome suelen volverse perfeccionistas al extremo. Con frecuencia, ese nivel de autoexigencia los deja paralizados frente a la hoja en blanco, no saben qué escribir porque quieren hacer una obra perfecta desde el primer minuto.

Cómo combatir el miedo a la hoja en blanco

No existe una única receta para perder el miedo a la página vacía. Hay ciertas estrategias que funcionan bien para muchos autores, pero no para otros. En todos los casos, esta situación negativa se puede revertir.

Cómo superar el miedo a la hoja en blanco

A continuación, veremos una serie de consejos prácticos que te ayudarán a superar tu miedo a la página en blanco. Comienza aplicando los que mejor se adapten a tu situación particular, a tu estilo y a tu nicho literario.

Consejos para superar el síndrome de la hoja en blanco

Por fin lograste hacer espacio en tu agenda y tienes el tiempo que necesitas para empezar a escribir ese libro tan postergado.

Te preparas un café, te sientas frente al ordenador y… no se te ocurre nada, no puedes comenzar a escribir.

¿Te sientes identificado con esta situación? Prueba hacer lo siguiente:

#1. Fijar objetivos

Este primer consejo es la puerta de entrada a una escritura rápida y placentera. Muchos autores se sientan a escribir esperando que la inspiración llegue a ellos como por encantamiento.

Algo así podría suceder algunas veces en tu carrera, sobre todo si eres un escritor «de brújula».

Sin embargo, lo más probable es que necesites una serie de pautas claras bien definidas antes de empezar a escribir. Los objetivos pueden ser amplios: escribir una novela o un libro de tal o cual género, dirigido a cierto público, abordando los temas tal y cual.

También puedes fijarte objetivos más específicos, como la cantidad total de páginas que tendrá la obra, cuántas escribirás por semana o por mes, cuándo vas a publicar tu libro, etc.

Trazar objetivos es indispensable en cualquier trabajo serio porque le da previsibilidad, te permite pensar las cuestiones globales, no solo las acciones concretas. Es muy importante saber cómo conseguir tus objetivos como escritor.

#2. Trabajo previo antes de escribir

Todo buen libro requiere una etapa de preproducción, un trabajo previo antes de la escritura en sí misma.

En algunos géneros literarios, el trabajo previo es largo y tiene cierta complejidad. Por ejemplo, si vas a escribir una novela sobre el Renacimiento, es indispensable que investigues en profundidad la historia de ese período, cómo era la sociedad, cómo era la tecnología, cómo era la vida política…

Lo mismo ocurre cuando escribes no ficción. En efecto, para publicar un manual práctico, por ejemplo, necesitas conocer a la perfección el tema del que vas a hablar. Los lectores de ese nicho esperan que el autor sea un experto en la materia, que tenga toda la autoridad necesaria para escribir un libro de esas características.

En algunos casos, el trabajo previo a la escritura de un libro puede llevar años e incluir viajes, visitas a grandes bibliotecas y entrevistas a informantes clave. Con toda esa información en tus manos, ¿todavía sientes miedo a la página en blanco? No te preocupes, aún hay más soluciones.

#3. Experimentar la escritura

Muchas veces, el miedo a la página en blanco es en realidad un temor a repetir lo mismo de siempre. Este problema es común entre escritores consagrados que ya tienen un público fiel.

Los autores de ese tipo han logrado consolidar un estilo propio y a veces se sienten atrapados por él, obligados a escribir siempre de la misma manera siguiendo las fórmulas que les dieron éxito.

Cuando esto ocurre, muchos escritores se estancan y no solo temen a la página en blanco, también tienen miedo a dar entrevistas y a comunicarse con su audiencia.

Una solución posible a este miedo es la experimentación literaria. Si estás cansado de escribir siempre lo mismo, ¡escribe algo distinto! Cambia el tipo de narrador que utilizas, prueba el monólogo interior, escribe sobre temas nuevos, escribe para otras audiencias.

Anímate a pensar fuera de la caja y vencerás los miedos que te paralizan.

#4. Empezar un libro por el principio no es necesario

¿Es indispensable comenzar a escribir un libro desde el principio? La respuesta es un «no» rotundo. Puedes empezar a escribir tu libro por la parte que quieras, por la que más te inspire, por la más fácil, por la que tengas más clara…

Escribir libros no es una ciencia exacta, hay tantos métodos para hacerlo como escritores existen en el mundo.

Así, si bien algunos autores escriben sus libros en orden natural, de principio a fin, lo más común es escribir por partes. Puedes hacer algo del principio y después avanzar al medio o al final.

Recuerda que la escritura de un libro es un proceso largo, no esperes escribir una novela o un libro de autoayuda en una semana, por más simple que parezca. El producto final esconde largas y pacientes horas de investigación, ensayo y error, corrección, etc.

#5. Hacer una lluvia de ideas

¿Todavía no consigues superar el miedo a la página en blanco? No hay problema. Prueba con una lluvia de ideas. Escribe todo lo que venga a tu mente, aunque sean ideas que parecen inconexas.

Deja fluir tu pensamiento, escribe incluso aquellos conceptos que parecen irrelevantes o poco adecuados para el libro que tienes en mente. Eso te ayudará a desecharlos de manera definitiva, si fuera necesario, pero también te permitirá ver su auténtico valor, si tuvieran alguno.

La lluvia de ideas es una técnica probada en diversos ámbitos literarios y ha demostrado su eficacia como antídoto para el miedo a la hoja en blanco.

#6. Dar un paseo

Ahora bien, si has estado tres horas sentado frente al ordenador y no puedes terminar ni un solo párrafo, quizás es tiempo de tomarte un descanso y cambiar de aire.

Salir de tu zona de confort podría traerte ideas frescas y originales que no se te hubieran ocurrido en casa.

Da un paseo, lee la realidad que te rodea y busca significados nuevos. Cuando regreses frente al ordenador tendrás más que un párrafo para escribir.

#7. Hacer ejercicios

El ejercicio físico activa el metabolismo. Cuando el cuerpo se siente bien, la mente piensa mejor. Es tan sencillo como eso.

Levántate de la silla y realiza estiramientos. Haz sentadillas, flexiones de brazos y otros ejercicios con tu propio peso. Puedes hacerlos en la misma habitación donde escribes y alternar una serie de ejercicios con unos minutos de escritura.

Esta técnica es sencilla y sus resultados sorprenden a más de un escritor bloqueado ante la página en blanco.

Consejos para superar el síndrome de la hoja en blanco - Infografía

Miedo al «qué dirán» de mi libro

A veces, el miedo a la hoja en blanco no es más que temor a la opinión de los demás. Escribes una línea y la borras pensando en lo que podría decir tu madre. Escribes otra y también la borras porque no quieres que la vean tus compañeros de trabajo…

Este es un problema de prioridades. ¿Te importa más tu trabajo como autor o la opinión de terceras personas? La respuesta está en ti.

Miedo a la hoja en blanco y procrastinación

En ciertas ocasiones, el miedo a la hoja en blanco es solo una excusa para postergar la escritura. ¡Asúmete como el escritor que eres y pon manos a la obra!

El miedo a la hoja en blanco se puede superar de mil maneras. En este artículo hemos intentado revelarte lo que mejor ha funcionado en nuestra experiencia.

¿Tuviste miedo a la hoja en blanco alguna vez? ¿Cómo lo superaste? ¡Cuéntanoslo en un comentario, será un placer conocer tu experiencia!

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6 comentarios en “Miedo a la hoja en blanco”

  1. Hola, buenos días, independientemente de que sean de mañana, de tarde, o de noche, buenos días. Mi nombre es Javier García y ya llevo varios libros publicados, la verdad, es que a todos nos pasa tener el folio en blanco, y no salirte nada de nada. La técnica de planificar antes de empezar a escribir es la ideal, pero también está la de documentarte sobre el tema que vayas a escribir. Gracias Roberto, por tus experiencias vividas aquí reflejadas, me he reflejado en ellas positivamente. Todos mis libros, excepto una novela que hice con un gran amigo, son co-ediciones con la editorial, y la verdad, es que ya no quiero pagar más, deseo seguir escribiendo, porque es lo que más me apasiona, pero con una sabiduría que lo dijo el crítico y poeta francés: Nicolás Boileau… “Antes de escribir, es preciso aprender a pensar”, y yo añadiría más, que es preciso e indispensable documentarse también de lo que quieras escribir. Gracias Roberto por dar, y dar sin recibir. Yo también soy de la idea de dar, y dar, sin recibir, porque la vida te enseña que sin esperarlo, recibes más de lo que das. Pasad, un buen verano, y disfrutar de la VIDA, SED FELICES.

    1. ¡Hola Javier! Ante todo, gracias por compartir tus reflexiones y experiencias con nosotros. Sin duda, cada escritor tiene su método y técnica, y es increíble ver cómo cada uno se enfrenta al temido folio en blanco. Estoy completamente de acuerdo contigo en la importancia de documentarse y, como mencionas, pensar antes de escribir. Es un consejo valioso, y es genial que lo hayas compartido aquí. Estoy seguro de que tu pasión por la escritura se refleja en tus obras. Si en algún momento decides dar el salto a la autoedición, aquí estamos para ayudarte y guiarte en el proceso. ¡Te deseo un verano lleno de inspiración, felicidad y buenos momentos! Y recuerda, cualquier consulta o inquietud, ¡estamos aquí para ayudar! 😊🌞📖

  2. Muy correcto, como todos los comentarios de Roberto.
    Que nadie piense que lo sabe todo. Siempre se puede aprender algo, sea de un maestro como Roberto o del más completo lego en literatura. A mí, por ejemplo, fue el comentario de una amiga con nula cultura literaria, a la que di a leer el borrador de mi última novela (en papel, nunca he editado en digital, pero lo haré). Inocentemente, me dijo: «Me ha gustado mucho, pero para mí termina muy rápido, me gustaría saber más». Ya me había pasado ese ramalazo por la mente, y ello me indujo a agregar un epílogo.
    Mi consejo es que antes de dar por terminado un escrito que lo lean simples lectores, que sean sinceros. A veces los escritores no vemos más allá de nuestras narices.

    1. ¡Qué gran consejo, JF.! A veces, las opiniones más sinceras y directas vienen de aquellos que no están inmersos en el mundo literario. Permitir que lectores variados lean nuestros trabajos nos da perspectivas frescas y valiosas. ¡Gracias por compartir tu experiencia!

      1. La hoja en blanco es uno de los obstáculos más frecuentes que yo enfrento. Todos los ejercicios que puedas aportar sobre este problema serán valorados. Excelente el blog, tu talento y tu maestría para inspirarnos a seguir escribiendo. Si existe algún libro específico sobre este problema por favor puedes publicar su título para que podamos conseguirlo. Gracias. Saludos.

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