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ToggleLa evolución de los personajes en una narración literaria es fundamental si deseas escribir un libro atractivo.
Los lectores de novelas y otros textos de ficción están cansados de leer siempre las mismas historias interpretadas por personajes aburridos y planos.
La evolución de los personajes es un rasgo clave de su condición humana y le da verosimilitud a la historia.
¿Cómo hacer evolucionar a los personajes de una novela? ¿Cómo dejar de lado los estereotipos literarios y construir personajes originales? Continúa leyendo y descubrirás los trucos principales para enriquecer y hacer evolucionar a los personajes de tu obra literaria.
Qué es la evolución de los personajes
La evolución de los personajes es el cambio de su naturaleza a lo largo del relato, la transformación de los sujetos literarios. Un ejemplo clásico es el del villano que termina haciéndose bueno después de recibir una lección moralizante.
También puede darse el caso de que un personaje bueno involucione y cambie sus valores positivos por otros de signo negativo. El personaje principal de la serie Breaking Bad, por ejemplo, pasa de ser un inocente profesor de química a convertirse en un criminal despiadado.
Evolución de los personajes de una novela
Al igual que las series, las novelas nos permiten desarrollar personajes en profundidad, hacerlos atravesar distintas situaciones que ocasionan transformaciones en su conducta.
Tal como ocurre en la vida real, los personajes de ficción no evolucionan en un instante, sino que atraviesan procesos extensos de cambio marcados por hechos y circunstancias especiales.
Cómo evolucionan los personajes de las novelas
La evolución de los personajes en una novela puede entenderse como una sucesión de estados. Al principio, los personajes tienen ciertas características y están en posesión de ciertos objetos de valor simbólico, o carecen de ellos.
Los personajes de las novelas evolucionan cuando esas circunstancias cambian. El cambio puede ser duradero o transitorio, leve o drástico, voluntario o casual…
Cómo escribir buenos personajes
La clave para escribir buenos personajes es dotarlos de rasgos originales y mostrar su evolución a lo largo de la trama.
Es cierto que algunos personajes no cambian demasiado en todo el relato. El rey, el juez, el bufón y otros estereotipos se definen por algunas características fijas y, si esos rasgos varían demasiado, el personaje se diluye y se hace poco creíble.
Pero los protagonistas de las grandes obras literarias atraviesan un viaje interior que los transforma de manera profunda y los hace evolucionar, como si fueran humanos reales.
Personajes de una novela y trama
Los personajes de la novela ponen en funcionamiento la trama. Escribir una trama original y atrapante solo es posible si logras darles una buena evolución a tus personajes.
Piensa en una historia clásica, como el Quijote. A decir verdad, la trama general no es demasiado compleja: un hidalgo empobrecido enloquece y se cree caballero andante.
Lo que hace brillante esta obra literaria es su protagonista. La evolución del personaje principal, con rasgos de locura y de cordura por igual, es una configuración única y original capaz de atrapar a millones de lectores en todo el mundo.
Personajes planos y personajes redondos
¿Qué son los personajes planos? Son aquellos unidimensionales, que se mantienen siempre iguales de principio a fin, como si las acciones de la trama no los afectaran.
Los personajes redondos, en cambio, tienen más dimensiones, mayor volumen narrativo, son poliédricos. Este es el tipo de personaje deseable para escribir una buena novela.
Evita el maniqueísmo en la construcción de tus personajes, no enfrentes sujetos 100 % malos con otros 100 % buenos, porque eso es poco creíble.
Cambio de los personajes en un relato
El cambio de los personajes es un poderoso motor para cualquier narración literaria. Los personajes que cambian como lo haría un ser humano de verdad despiertan la empatía de los lectores.
El cambio de un personaje puede ser sutil o moderado, pero también puede ser profundo. Recuerda que, para hacer que un personaje cambie mucho, necesitas una buena extensión de texto o, al menos, un motivo válido para que haya una transformación abrupta.
Cómo hacer una evolución de personaje
Para hacer la evolución de un personaje debes pensar cuál es el punto de partida y cuál es la meta. En otras palabras, la evolución de un personaje debe incluir dos o más estados distinguibles con claridad. Así, por ejemplo, tu personaje puede pasar de pobre a rico, de ignorante a sabio, de rey a súbdito, etc.
Sin embargo, ten en cuenta que, mientras más distantes sean los extremos en la evolución de tu personaje, más fácil será caer en estereotipos.
Tipos de evolución de los personajes
En general, los personajes de una novela pueden evolucionar hacia el bien o hacia el mal. Esto no quiere decir, como ya hemos mencionado, que tus personajes tengan que ser solo malos o solo buenos.
Recuerda que los valores positivos y negativos son solo tendencias, y que no es conveniente, en términos argumentales, caer en una oposición binaria entre el bien y el mal.
Dicho esto, las principales formas de evolución de los personajes son las siguientes:

#1. Cambio positivo
La evolución positiva de un personaje novelesco es un cambio hacia la virtud, la templanza, el valor y otros rasgos deseables del alma humana.
Santiago, protagonista de la novela El alquimista, de Paulo Coelho, es un buen ejemplo de evolución positiva de un personaje.
#2. Cambio negativo
El cambio negativo en el personaje de una novela es una involución hacia lo malo. Un cambio negativo no siempre significa la transformación de bondad en maldad, también puede ser un camino desde la alegría a la tristeza, de la generosidad a la envidia, etc.
Dorian Gray y el monstruo de la novela Frankenstein son ejemplos de evolución negativa de un personaje.
#3. Arco plano
El arco plano en la evolución de un personaje es la tendencia a mantener la misma personalidad, la misma conducta y los mismos valores durante todo el relato.
Los personajes caracterizados por un arco narrativo plano suelen ser secundarios o estar reservados apartes específicas de la trama, con funciones características e inmutables.
Por ejemplo, los sirvientes en la comedia clásica grecolatina mantienen una misma actitud durante toda la obra y no experimentan ninguna evolución.
El arco narrativo plano no es recomendable para los personajes principales porque puede restar atractivo a la obra.
Cómo desarrollar los personajes de una novela
Según lo que hemos visto hasta aquí, está claro que el desarrollo y la evolución de los personajes de una novela exigen cambios, transformaciones evidentes.
Estas transformaciones están ancladas a la trama y son inseparables de ella. Los hechos significativos en una narración literaria marcan a los personajes y cambian algunas de sus características, ya sea para bien o para mal.
Desarrollo de personaje y su importancia
Si tu sueño es publicar una novela que cautive a miles de lectores en todo el mundo, no puedes reducir el argumento a las características estáticas del protagonista. Eso no enganchará a ningún lector…
Piensa, por ejemplo, que deseas narrar la historia de tu vida en forma de novela. El simple hecho de contar esa historia implica el paso del tiempo, desde la niñez hasta la vida adulta. Esa evolución cronológica es la base para el desarrollo de los personajes.
Sin embargo, el paso del tiempo por sí mismo no es suficiente para dar cuenta de la evolución del protagonista de un relato.
Cada época está asociada de manera indivisible con una serie de hechos y relaciones con otros personajes. Así, se configura una evolución psicológica, un viaje interior al cabo del cual se opera una transformación importante.
Ejemplos de evolución de personajes
Dos ejemplos clásicos de evolución de personajes son Sancho Panza y don Quijote.
En su libro Guía del lector del Quijote, Salvador de Madariaga postula una interpretación según la cual la novela de Cervantes muestra una quijotización de Sancho y una sanchificación de don Quijote.
Puedes leer aquí esta interesante teoría.
Evolución de personajes y estereotipos literarios
Los estereotipos literarios son sujetos narrativos que, por definición, se mantienen estáticos durante todo el relato.
Los estereotipos literarios tienen una base tradicional y son reconocidos por la mayoría de los lectores. No es usual ver la evolución de los personajes estereotípicos, aunque eso no quiere decir que sea imposible hacerlos evolucionar.
Una narración que hace evolucionar a un personaje arquetípico es una creación rupturista que puede tener enorme atractivo para muchos lectores.
Evolución de personajes
Recapitulando lo dicho hasta aquí, resulta evidente que el personaje y su evolución a lo largo del relato son cuestiones inseparables.
En otras palabras, un buen personaje debe evolucionar hacia alguna dirección. De lo contrario, la trama se estanca y el lector se aburre.
Evolución de los personajes: claves principales
¿Te gustaría hacer evolucionar a tus personajes de una manera interesante, profunda y atractiva para el lector? Recuerda esto:
#1. La historia de un personaje
Todos los personajes tienen una historia de vida que abarca pasado, presente y futuro. No hace falta que todas las etapas aparezcan en la obra de manera explícita, pero debes enfocarte en alguna de ellas y articularla de forma armónica con el resto, mediante relaciones lógicas.
#2. El arco narrativo
El arco narrativo de un personaje es la línea imaginaria que podemos trazar uniendo los puntos destacables de su historia.
Un buen arco narrativo tiene partes altas y bajas. Manejar el ritmo y la frecuencia de estos hitos es fundamental para desarrollar una buena evolución de los personajes.
#3. La evolución de un personaje
La evolución de un personaje es su principal rasgo de humanidad. La ficción se nutre de la realidad y solo las historias de profundo valor humano conquistan el corazón de millones de lectores.
¿Cómo crees que debe ser la evolución perfecta de un personaje? ¿Cuál es el arco narrativo que más disfrutaste leer? ¿Qué te parecen estos consejos para desarrollar la evolución de los personajes? ¡Déjanos un comentario aquí abajo y cuéntanos tu opinión sobre este tema!
13 comentarios en “Evolución de los personajes”
Me gustaría escribir un libro que sea agradable de leer, que le guste a mucha gente y que se venda mucho. Escribí dos libros pero no vendí ni uno sólo. Son libros sobre invenciones realizadas por mí las cuales no me fueron reconocidas ni pagadas. No es un tema que haya interesado al parecer. Pero me gustó mucho escribir y me gustaría hacerlo más asiduamente e incluso probar con otro género como la novela. Pero quiero que tenga éxito. Escribir dos libros y no vender nada es muy aburrido, tedioso y una perdida de tiempo. Y yo quiero trabajar y ganar mi sueldo en este rubro. Me gustaría escribir un best seller mundial. Abrazos a todos desde Argentina.
¡Hola, Diego! Entiendo tu frustración después de no haber vendido copias de tus primeros libros. El desafío de escribir algo que cautive a un público amplio y se convierta en un bestseller es grande, pero no imposible. Cambiar de género y probar con la novela puede ser un buen paso. Te aconsejo que investigues el mercado para identificar temáticas y géneros populares, y que consideres las tendencias actuales que puedan resonar con un público más amplio. La clave está en encontrar un equilibrio entre escribir sobre lo que te apasiona y lo que interesa a los lectores. Además, no subestimes el poder del marketing y la promoción. Recuerda, cada gran escritor comenzó con un sueño y enfrentó desafíos. ¡Abrazos y mucho ánimo desde aquí!
Hola Diego. Perdón por la intromisión; cuando los autores participamos en este blog para compartir opiniones, experiencias o gratitud, quedamos ávidos ante las posibles respuestas de Roberto que, como siempre, son acertados consejos, mensajes afables y alentadores y que siempre nos hacen tener confianza o recuperar fuerza para emprender o continuar con nuestra faceta creativa. Sin ánimo de molestar, intervengo para trasmitir que, aunque tu deseo de escribir una obra maestra que guste a nivel mundial es el mismo deseo que podemos tener todos los que escribimos novelas, tu mensaje nos muestra cosas mucho más importantes.
Si te gusta inventar, ¡inventa! y no dejes de plasmar tus invenciones en libros para que éstos se conviertan en un legado palpable. No importa si no se venden muchos ejemplares; con que exista sólo uno, habrás cumplido objetivos (inventar y dejar huella de ello) y ahí quedará tu legado.
Ten en cuenta que si escribes sobre inventos tuyos, es muy probable que el público a quien pueda interesar sea muy reducido. No te frustres por ello. Ganar dinero escribiendo libros es una suerte de tan pocos, que casi se convierte en una utopía. ¿Qué es el dinero comparado con la satisfacción personal de poder dejar un legado y descubrir en ese trayecto que te gusta escribir?
Todo depende de la lectura que hacemos de nuestras propias experiencias.
Por otro lado, si has descubierto que te gusta escribir, hazlo.
Sin dejar de lado tus invenciones, escribe historias. Escribe de cualquier cosa que te ronde por la cabeza y que te salga del corazón.
Ése es el comienzo del camino que puede llevarte al lugar llamado “Obra Maestra”.
Escribir puede ser una profesión pero ante todo es una necesidad vital que, en la mayoría de los casos, alimenta más al alma que al cuerpo. Mientras te guíes por estas premisas, siempre habrás triunfado. El éxito, empieza por tenerse para uno mismo; si con el tiempo se tiene ante el mundo entero, mejor que mejor pero para mí, éste último es menos importante que el anterior.
La intención de ésta, mi humilde opinión, es tratar de animarte a que no dejes de lado ninguna de tus facetas creativas -las ya existentes y las recientemente descubiertas- en función de cuánto sea el dinero que te puedan reportar.
Te deseo todo lo mejor y que tu creatividad no se vea afectada por una posible rentabilidad material. Crear, nos mantiene vivos. Escribir nos recicla, nos trasforma; nos hace crecer, evolucionar, comprender, descubrir; nos libera….y algún que otro etcétera que tú mismo irás descubriendo a medida que vayas recorriendo ese trayecto.
Con afecto, Marieta Ézaro desde España.
Buen tema y muy bien explicado. Gracias por compartirlo. Totalmente de acuerdo con lo que dices en él. Los personajes de una novela tienen que ser completos. Igual que una figura en 4D; no servirán de nada si sólo son en una o dos dimensiones. El autor, deberá conocerlos como la palma de su mano. Quizá, en la novela que se está fraguando, no se den todos los escenarios posibles en los que actuará ese personaje pero, a veces, el personaje en sí es el que te muestra escenarios que ni siquiera te habías planteado a priori. Y, esto sólo es posible cuando se conoce profundamente al personaje. De alguna manera, se puede decir que adquiere vida propia y se genera una simbiosis entre personaje/s, autor y escena/s tan brutal que habrá páginas que se escriban casi solas. Me ha gustado mucho que tocaras este tema. Gracias Roberto.
¡Qué alegría leer tu comentario, Marieta! Me encanta ver que resonó contigo la importancia de la profundidad y evolución de los personajes en la narrativa. Es exactamente como describes: los personajes bien desarrollados tienen esa magia de llevar la historia hacia direcciones inesperadas, convirtiéndose casi en entes autónomos que dialogan con su creador y el mundo que los rodea. Y sí, esas páginas que se escriben «casi solas» son testimonio de una conexión profunda entre el autor y sus creaciones. ¡Gracias a ti por compartir tu perspectiva y enriquecer aún más la conversación sobre este fascinante tema!
Un abrazo!
¡Un abrazo para ti también, Marieta! Gracias por compartir ese gesto de afecto. Si en algún momento deseas hablar sobre proyectos de escritura o tienes curiosidad por la autopublicación, aquí estamos. ¡Te deseo todo lo mejor en tus emprendimientos literarios!
Interesante, en realidad los personajes son como el corazón de la novela y los responsables de que la historia funcione. Hay grandes novelas con personajes que apenas cambian: «Ulises» por ejemplo, pero si es cierto que la evolución de los personajes motiva al lector y, en cierta forma, le enganchan con la historia.
Tienes razón, la evolución de los personajes es fundamental en muchas historias, pero también existen excepciones como «Ulises», donde la profundidad y complejidad de los personajes se mantienen sin necesidad de una gran transformación. Esto demuestra la versatilidad en la narrativa. Cada autor tiene su propio enfoque para enganchar al lector, ya sea mediante el desarrollo de sus personajes o por medio de otros elementos como el ambiente, el argumento o incluso el estilo de escritura. La magia de la literatura radica en esa diversidad de técnicas para contar una historia.
Excelente tema, me gustó mucho.
Que bueno que sigan publicando artículos interesantes cómo éste. Me gustaría, además, que abordaran el Tema sobre creación de cuentos para niños.
Muchas gracias
¡Gracias por tus palabras y por la sugerencia! Nos alegra saber que nuestros artículos te resultan interesantes. La idea de explorar el tema de la creación de cuentos para niños es fantástica; definitivamente, es un área rica en creatividad y posibilidades. Adentrarse en el mundo de los cuentos infantiles no solo requiere de imaginación, sino también de una comprensión profunda de cómo los niños ven y entienden el mundo a su alrededor. Trabajar en esta línea puede ser tanto un reto como una gratificante aventura. Te aseguro que tomaremos en cuenta tu interés por este tema para futuras publicaciones. ¡Sigue atenta a nuestras novedades!
Nunca es tarde para aprender y ese es mi caso. Gracias Roberto por ser tan buen maestro.
Leyendo tu escrito he recordado el mío que me ha parecido Marcelino pan y vino, con cierta guasa me explico; Lo que más me gusta es transformar a virtuosos en mendigos y a desheredados en dioses.
Disfrutaría mucho con ese trabajo subterráneo.
No sé si sabría hacerlo. Lo intentaría sin duda. Un saludo.
¡Hola, Pilar! Me encanta ver tu entusiasmo por aprender y tu pasión por la escritura. Transformar personajes de virtuosos a mendigos y viceversa es un arte que requiere habilidad y mucha sensibilidad hacia las circunstancias humanas. Te animo a que lo intentes; la escritura es un viaje de descubrimiento personal y nunca sabemos de lo que somos capaces hasta que nos ponemos a prueba. Y recuerda, cada gran historia comenzó con un escritor que se atrevió a escribir la primera palabra. ¡Sigue adelante con tus proyectos!